martes, 13 de junio de 2017

Las huertas de cacao (primera parte)

 
El cacao (Theobroma cacao L.) es una planta originaria de la cuenca del Amazonas en Sudamérica, que fue traída a México aproximadamente en el año 3 500 a. C.
  Fue aquí, en donde se le dio un uso distinto a la forma del consumo de sus frutos, pues en lugar de fermentar la pulpa para obtener una bebida embriagante, se opto en utilizar sus granos tostados y molidos para preparar una deliciosa bebida llamada xocolatl, la misma que conoció y bebió Hernán Cortés cuando fue invitado a comer por el emperador Moctezuma.
   Originalmente el xocolatl (chocolate) se preparaba cociendo en agua los granos molidos del cacao, se les añadía vainilla y se endulzaba con miel de abejas silvestres.
    Los granos de cacao eran tan apreciados que se utilizaron también como medida de valor (moneda) en los intercambios comerciales entre las diferentes culturas y civilizaciones prehispánicas.
 
 Después de la conquista de la Provincia de Coliman, muchos españoles ávidos de riqueza, se dedicaron a las actividades mineras, la región de Motines (actual municipio de Aquila, Michoacán) se lleno de aventureros extranjeros que explotaron inmisericordemente a la raza indígena.
     El rápido agotamiento de los placeres de oro, salvo a los naturales de la extinción total, pues para 1527 ya casi nadie ejercía este oficio en esa area geográfica que fue conocida con el nombre de los Motines de Oro.
   En ese mismo año llegó a la Villa de Colima, Manuel de Cáceres, que para 1528 se desempeñaba como alcalde ordinario de la misma.
    Contrajo matrimonio con Isabel Ruiz de Monjaraz y tuvieron dos hijos que fueron María y Gonzalo de Cáceres.
    A diferencia de sus coterráneos, Manuel de Cáceres, vio la minería como una actividad secundaria y se dedicó de lleno a la agricultura y la ganadería.
    De hecho, es considerado el primer agricultor novohispano del actual estado de Colima, pues fue el primero que estableció plantaciones de cacao, sin embargo, es conveniente aclarar, que las huertas de cacao que sembró, estuvieron en el Valle de Alima (municipio de Coahuayana) y otra en Maquili (municipio de Aquila), todas ellas en el actual estado de Michoacán.
    La Suma de Visitas, nos da informes muy poco claros de las primeras y dice textualmente:
    (178) Caliguacan, en Colima, en Manuel de Cáceres.
     Esta estancia esta diez leguas de Colima, tiene cuarenta casados, el tributo que dan, es trabajar en la huerta de cacao que está junto a ellos, esta poblada en términos de media legua (2 kilometros) de tierras que compro el dicho Manuel de Cáceres, en la cual tiene la huerta del cacao grande y otra pequeña que esta media legua (de distancia) de ella, la cual compro de los indios de Alima.
    Después analizar varios documentos con fechas posteriores que se encuentran en el Archivo Histórico del Municipio de Colima, sabemos que estas primeras dos plantaciones en el Valle de Alima fueron la estancia ganadera y huerta de cacao de Salahuacan y la huerta del Señor San  Miguel, ubicadas entre el pueblo actual de Santa María de Miramar y el rancho del Paso de los Gringos, y separadas solamente por las tierras del extinto pueblo de Tlapiztlan.
    Un poco antes de su  muerte (ocurrida en 1545), Don Manuel de Caceres tambien sembró las huertas de Amatica (entre el rancho El Cerrito y el rancho Amatique), la primera huerta de Achiotlan (Achotan) y la huerta de Pochotitlan, también conocida como huerta de Suchiltzin (El Ojo de Agua). Entre todas ellas superaban facilmente 70 000 arboles de cacao en explotación.
   Su ejemplo fue seguido por otros españoles y para 1560 existian huertas de cacao en toda la parte baja del Valle de Alima, entre ellas, las huertas de Mexcala, San Juan del Monte, la huerta de Antonio de Maya y la huerta Santa Clara.
    Sobre cada una de ellas, sus dueños y sucesores, así como también los negros e indígenas que trabajaban para los españoles hablaremos en las proximas publicaciones.
   

lunes, 22 de mayo de 2017

El Valle de Alima

 
 Poco tiempo después de que las tropas españolas bajo el mando de Gonzalo de Sandoval, apoyadas por el contingente tarasco de Huizizilci, conquistaran el territorio de Coliman, los pueblos indígenas de esta región fueron repartidos en encomiendas.
   Los indios estaban obligados a trabajar gratuitamente o darle tributo al conquistador beneficiado y el a cambio tenía el compromiso de  instruirlos en la religión cristiana.
   A partir de entonces a el area geopolítica que ahora conocemos como el municipio de Coahuayana, se le asigno el nombre de El Valle de Alima, nombre que conservo por 268 años, y que en 1791 fue cambiado por el de Subdelegación de Coaguayana, sin embargo en  los papeles de traslados de propiedad de terrenos el termino Valle de Alima todavía perduro hasta el año de 1850.
   La Crónica de Michoacán menciona que en la batalla final de la conquista de Colima, los tarascos "mataron y sacrificaron a muchos de Colima y de sus pueblos, y los españoles no decían nada" tal vez por estar en el lugar donde se inició este enfrentamiento hallan  sido los habitantes de los pueblos originarios de esta zona a los hacen referencia, pues varios de ellos desaparecieron y solamente quedaron cinco con muy pocos habitantes cada uno.
   Alima con apenas 30 indios fue entregado al encomendero Sancho de Orna, Tlacuahuayan (Tlacanayna), con 15 indios, era la encomienda de Alonso de Quiñones, Tlapiztlan con 40 indígenas  perteneció a Manuel de Cáceres y de los otros dos que fueron Huepantitlan yTezuacan hasta el dia de hoy se desconoce el nombre de sus propietarios.
  Para el año de 1532, cuando se levantó el padrón de vecinos y pueblos de Coliman, Sancho de Orna y Alonso de Quiñones, ya eran difuntos y sus pueblos (Alima y Tlacuahuayan) pasaron a manos de la corona, por lo que se les asigno un corregidor, quien se encargaba de la recolección y la venta de los tributos. Como pago por su trabajo, el corregidor recibía la tercera parte del dinero obtenido después de subastar los productos en una almoneda publica que se realizaba cada vez que era necesario, en la Villa de Colima.
   Alima por ejemplo, entregaba, de acuerdo a la Suma de Visitas de la Nueva España 1548-1550, 48 mantas y 72 gallinas de la tierra (guajolotes) en tanto que Tlacuahuayan y Huepantitlan entregaban en conjunto 24 mantas, 36 gallinas de la tierra y 50 fanegas de maíz.
   Los nombres de los  corregidores de esta región que aún se conservan en varios documentos del Archivo Histórico del Municipio de Colima son los siguientes:
   Pedro Ruiz de Vilches, corregidor de Tlapiztlan en 1563, Diego Aguilar del Castillo corregidor de ese mismo pueblo en 1564 y 1569, Diego López de Ayala corregidor de Alima y Tlacuahuayan (Tlacobayan) en 1567, Juan Fernández de Ocampo corregidor de Alima y su partido de  1570 a 1572, Gonzalo Moreno corregidor de Tlacuahuayan de 1575 a 1576 y de Tezihuacan de 1576 a 1577, Alonso Carrillo de Guzmán  corregidor de Tlacuahuayan en 1577 y Martín Ruiz que fue corregidor de Tlapiztlan en 1593.
   Si usted es buen observador, notara que solo se nombraba un solo corregidor para esta zona independientemente del nombre del pueblo al que era asignado y esto se debía a que también tenía la obligación de ejercer la aplicación de la justicia entre los habitantes de todo el Valle de Alima sin importar que fueran indios, negros o españoles  y la existencia de otros más, solo serviria para entorpecer sus labores.
   Para su administración interna, cada uno de los pueblos indígenas, nombraba un gobernador o alcalde, un regidor y un mayordomo; los dos primeros los representaban ante las autoridades españolas y el mayordomo se encargaba de ver que la comunidad  cumpliera con el pago de los tributos.
   En el Archivo Histórico del Municipio de Colima, aun se conservan, algunos documentos que han permitido que los  nombres de varias autoridades indígenas hallan sobrevivido, a pesar de los siglos trascurridos. Entre ellos se encuentran:
   Pedro Tequitlate, gobernador del pueblo de Alima en 1552.
   Francisco Mozque, cacique de Tlapiztlan que murió en 1556.
   Martín Cortés, gobernador de Tlacuahuayan (Tlacuabayan) en 1570.
   Don Sancho (Sanchez) gobernador de Tlapiztlan fallecido en 1574.
   Don Gabriel, gobernador de Tezehuacan en 1574.
   Y algunos más, entre los que destaca  Alonso de Guzmán alcalde de Tlapiztlan de  1574 a 1576.
    Los indígenas del Valle de Alima a pesar de los abusos y vejaciones sufridas por los extranjeros que se apoderaron de sus tierras, sobrevivieron precariamente durante dos siglos más (después de ser conquistados) y finalmente desaparecieron para siempre entre 1738 y 1740 cuando una severa epidemia de una enfermedad conocida por el nombre de matlazahuatl los exterminó.
    Las ruinas de sus pueblos se podían observar todavía casi completas en 1970, pero los trabajos de nivelación de los campos agrícolas, realizados entre 1985 y el año 2000, prácticamente han borrado los vestigios de una antigua cultura, cuyos primeros habitantes llegaron a esta región en el año 200 a.C y que perduró por un lapso de 1938 años.
    Después de visitar las zonas arqueológicas de Coahuayana y de analizar los datos de la Suma de Visitas y varios documentos de las obras del excepcional historiador Dr. José Miguel Romero de Solís realice el mapa que se presenta en este artículo, que de cierta manera complementa el trabajo de el profesor Carl O.Sauer que cuando elaboró el mapa de Colima del siglo XVI, sitúo erróneamente al pueblo de Alima en donde ahora está Cerro de Ortega y nunca anotó el nombre de los otros cuatro asentamientos humanos en ninguna parte de la imagen mencionada.
 Sobre los españoles que vivieron aquí y las actividades económicas que desarrollaron, hablaremos en el siguiente artículo.

 

martes, 16 de mayo de 2017

Coliman


 Muchos años antes de la llegada a nuestra Patria, de Hernán Cortés y su abigarrado ejercito en el que se mezclaban soldados españoles, portugueses y algunos mas de otras nacionalidades; existía en el occidente de Mesoamérica un pequeño estado indígena llamado Coliman. Estaba formado por tres señoríos llamados Alima, Colimonte y Cihuatlán, todos ellos situados  en la zona costera, cercana al litoral del océano Pacífico. El  area que cubría era aproximadamente de 170 kilómetros de largo por 40 a 50 kilómetros de ancho y se extendía desde la Sierra de Maquili en el estado de Michoacán hasta unos cuantos kilómetros mas allá del río Marabasco en el estado de Jalisco. es posible que rumbo al este y al noreste de sus limites geográficos allá tenido varios pueblos tributarios, sometidos después de haber sido  derrotados en algún enfrentamiento bélico, y que por lo mismo odiaban  a los colimecas a quienes veían como sus verdugos.
     El pueblo de Coahuayana Viejo esta situado sobre los restos de una comunidad indígena llamada Tlacuahuayan y a menos de un kilómetro de ella, rumbo al norte, después de cruzar el arroyo de Achotan, aun se puede ver una parte de los restos del extinto pueblo de Alima, que fue la capital del señorío del mismo nombre, el mismo que menciona Hernán Cortes en su Cuarta Carta de Relación lo que nos permite deducir, que el municipio de Coahuayana en donde se encuentran vestigios de más de de diez pueblos indígenas,  es un pedazo del estado de Colima que se encuentra cautivo en Michoacán y cuya historia es omitida por los historiadores de esta entidad federativa y anexada como propia por los colimenses, lo que ha conllevado a un problema de identidad cultural que afecta a los habitantes de esta región, pues desconocen que fue en estas tierras donde sucedieron dos fuertes enfrentamientos armados entre indígenas y españoles, unos intentando defender y otros conquistar el territorio de Coliman.
    Para dar conocer ese pasaje del pasado me permito publicar lo siguiente:
    El dia 13 de agosto de 1521 el ejército de Hernán Cortes y sus miles de indígenas aliados, después de dos años de asedio y frecuentes y sangrientos enfrentamientos armados, consiguieron tomar la ciudad de Tenochtitlan poniendo fin al predominio militar y político de los aztecas en la zona central de lo que ahora es nuestro país.
 
    El siguiente paso de Hernán Cortes fue mandar  a Francisco Montaño, Bartolomé López, Gaspar de Tarifa y a Diego Peñaloza a una misión comercial a Michoacán, para que recabaran además  información sobre un camino que los llevará al Océano Pacífico y sobre la riqueza de las regiones aledañas  a ese reino. Cuando estuvieron ante el gobernante tarasco Tangaxoan, le entregaron los presentes enviados por su comandante, entre ellos diez cerdos que fueron aceptados de buen agrado. Por medio de el, se enteraron de la existencia de minas de oro en el area de Motines y de una región llamada Coliman con cuyos habitantes habían tenido los tarascos algunos enfrentamientos anteriormente.
    Algunos días después solicitaron a Tangaxoan su apoyo para realizar un intento pacífico de someter al territorio de Coliman, y su petición fue aceptada, fueron acompañados durante todo el trayecto por veinte principales y mucha gente, hasta un pueblo llamado Haqzacuaran, cercano a la Huacana; y desde ahí mandaron un grupo de emisarios para solicitar que vinieran de paz "los señores de Colima", cosa que no sucedió y ante la certeza de que los emisarios habían sido sacrificados se regresaron muy desalentados a Uicicila. Lógicamente los emisarios tienen que haber llegado o pasado por lo que hoy es el municipio de Coahuayana y fueron sacrificados muy probablemente en los pueblos de Alima o Caxitlan, las  capitales de los dos señoríos colimas que defenderían su territorio pocos tiempo  después.                                                                                                                            Algunos  meses habían transcurrido, cuando la primera incursión española  al reino de Michoacán se realizó. Los soldados iban bajo el mando del capitán Cristóbal de Olid, ante quien se sometió en forma pacifica, el ultimo gobernante tarasco que existió, el caltzontzin Tangáxoan Tzintzicha, quien mando a Tenochtitlan  como embajadores suyos a don Pedro y a Huzizilci cargados de ofrendas para Cortes, declarándose vasallo del rey de España,
    Don Hernán acepto los regalos y para probar su fidelidad pidió a los embajadores que mandaran al puerto de Veracruz a un nutrido grupo de guerreros para que trasladaran desde ahí hasta Zacatula, las anclas y herramientas que necesitaba para la construcción de unos barcos en este ultimo lugar.
   Cuando las anclas y pertrechos llegaron a la capital de los tarascos, Cristóbal de Olid se puso al frente y emprendieron la marcha con rumbo a Zacatula, antes de llegar a su destino Juan Rodríguez de Villafuerte tomo la mitad de las tropas y se desvió rumbo a Coliman.
  Justo en la frontera entre Motines (actual Municipio de Aquila) y Coliman en un lugar conocido como el Paso de Alima  se enfrentaron con los colimecas y los invasores sufrieron una aplastante derrota, ahí murieron los españoles Juan Álvarez Chico y los corcovados Madrid y Najara y muchos de sus aliados indígenas.
   Villafuerte se vio forzado a regresar a Zacatula cargando sobre sus hombros la responsabilidad de este fracaso.
   Algunos historiadores de escritorio piensan que el paso de Alima se encontraba en la playa de San Juan de Alima y están en un grave error, esa bahía, antes de que existiera la carretera costera fue  un lugar encerrado por una gran montaña por el norte, el océano Pacífico por el sur y al noroeste y sureste altos e inexpugnables arrecifes que se adentran en las aguas marinas por los que jamás pasaría una cabalgadura,
   Después de recorrer la sierra de Maquili encontré que el único paso natural en estas montañas entre los municipios de Aquila y Coahuayana  es la Barranca de la Mojonera y desde mi punto de vista personal, ese lugar, es el histórico y mítico Paso de Alima.
   Esta derrota preocupo mucho a don Hernán, pero tuvo que ser paciente y espero a que concluyera la temporada de lluvias, la persona designada por el, para vengar la afrenta sufrida, fue el capitán Gonzalo de Sandoval, quien llegó de un lugar llamado los  Impilcingos (Guerrero) a Zacatula, entre fines de marzo y principios de abril de 1523.
   La Cuarta Carta de Relación menciona que con los hombres que llevaba y con los que de ahí tomo, reunió un ejército compuesto por "50 de a caballo y 150 soldados de infantería", también recibió el apoyo  de un contingente tarasco bajo el mando de Huizizilci.
   El trayecto que recorrieron y los pueblos a los que se enfrentaron, los conocemos por medio del informe de méritos y servicios de Jeronimo Lopez y podemos de manera clara imaginar que después de que partieron de Zacatula, durante varios días no tuvieron ningún incidente, pero al llegar a la región de Motines (el actual municipio de Aquila, Michoacán) los naturales del pueblo de Motín los enfrentaron y perdieron la batalla, pocos  kilómetros más adelante se desviaron hacia el norte y en esa ocasión fueron los indígenas del pueblo de Aquila los que se les opusieron, después se desplazaron  rumbo al noroeste y llegaron a Epatlan un pueblo situado en la desembocadura del río Aquila  muy cercano a donde se encuentra ahora La Placita de Morelos y aunque tal vez, los epatlecos recibieron el auxilio de sus vecinos de Cuscacuautla, un pueblo ubicado  en la  banda contraria del río, también fueron sometidos por los invasores.
   Desde  Epatlan se veía la sierra de Maquili y por atrás de ella  se encontraba Coliman, nadie sabe cuantas cosas pasaron por la mente de Sandoval y sus hombres antes de dormir esa noche, pero al día siguiente partieron rumbo al norte y tal vez después de llegar al Cerro Pelón, tomaron una vereda hasta el Puerto del Ciruelo y de ahí decididos a vencer o morir se encaminaron al Paso de Alima (Barranca de la Mojonera).
   En esta batalla gracias a su superioridad numérica, los invasores lograron penetrar al  valle (del actual municipio de Coahuayana) y los nativos tuvieron que retroceder hasta el pueblo de Tecomán, en donde fueron totalmente  derrotados, concluyendo así la conquista del estado o reino de Coliman.
 



sábado, 22 de abril de 2017

Boca de Apiza

 
Boca de Apiza Michoacán
 Boca de Apiza es un pueblo que forma parte del municipio de Coahuayana en el estado de Michoacán de Ocampo, México.
   Esta situado geográficamente entre los 18° 41´01´´ de latitud Norte y los  -103° 44´12´´ de longitud Oeste del meridiano de Greenwich y se encuentra a una altura media de 3 metros sobre el nivel del mar.
   El caserío se ubica en la margen noroeste del río Coahuayana que este lugar une sus aguas con las del Océano Pacífico, desde la desembocadura del río, corriendo hacia el sureste, se extiende una hermosa playa de arenas grises y allá, a lo lejos se perfila la silueta de las montañas de la Sierra de Maquili que dividen a los municipios de Aquila y Coahuayana.
   Apiza es una palabra de origen náhuatl que significa "agua delgada", sus raíces son el vocablo atl=agua y se complementa con la palabra pitzahoa=delgada (o).
   Su fundación se remonta muy probablemente al año de 1865, pues aparece por primera vez en el mapa del estado de Michoacán realizado en 1866 al que se conoce como la Proyección Policónica Esferoide de Clarke.
   No existen a la fecha, documentos que nos permitan conocer el nombre de sus primeros habitantes, pero un informe del C. Luis Valle, comisionado por la Secretaría de Guerra y Marina para la exploración de la costa michoacana que fue entregado al C. Francisco Mejía, Secretario de Estado y del Despacho de Hacienda y Crédito Publico en 1875, nos permite suponer  que muy probablemente trabajaban acarreando maderas preciosas de contrabando  por vía fluvial hasta los buques de vapor de la compañía norteamericana  Pacific Timber.
    En la pagina 417 del Diccionario Histórico y Biográfico de la República Mexicana  escrito entre 1888 y 1891 por el geógrafo Antonio García Cubas hay una pequeña anotación referente a este pueblo y  dice textualmente:
   "Boca de Apiza .- Rancho de la municipalidad de Coahuayana, Distrito de Coalcoman, Estado de Michoacán: con 5 habitantes".
   Los libros de partidas de nacimientos del Registro Civil de Coahuayana correspondientes a los años de 1895, 1896 y 1897 nos permiten conocer los nombres de las personas que vivieron en esa época en este pueblo y que fueron:
   Miguel Peña y su esposa Encarnación Medeles, padres de Isidro Peña (1895).
   Miguel Villegas y su mujer llamada Elena Montero, progenitores  de Antonio Villegas (1896).
   Crescencio Virgen y su consorte Celedonia Pano, padres de Juana Virgen (1897) que emigraron un año después al pueblo de El Ticuiz.
    El resto del vecindario lo formaban Dolores Leiva y los hermanos Moisés y Bernardo León.
    Para 1906 Don Eduardo Iturbide era el nuevo propietario de las haciendas de Coahuayana y San Vicente y por lo tanto, también el dueño de los terrenos en los que se encontraba este pueblo.            
   Boca de Apiza estaba habitado por tres familias de  las que no se tienen sus nombres completos y estos son aquellos que se han podido corroborar:
   Mariano Ortega y su esposa Rosa Sandoval que fueron los padres de María de la Esperanza Ortega.
   Catarino González progenitor de María González y Vicente Rojas padre de José Trinidad Rojas.
   Estos nombres se encuentran en el libro de nacimientos del Registro Civil de Coahuayana correspondiente al año de 1906, sin embargo a principios de 1907 un vecino soltero  de esta misma población contrajo matrimonio con una mujer de Manzanillo, Colima; se llamaba Juan Hernández y ella Tomasa Cisneros. Los datos que aportaron al juez del registro civil corroboran la existencia del Puerto de Boca Apiza al que alude Eduardo Iturbide en su libro "Mi paso por la vida", pues Juan Hernández era el empleado marítimo de ese lugar.
  Después de  La Revolución Mexicana, Boca de Apiza casi desapareció pues aparece en el censo de 1921 con solo 3 habitantes (dos hombres y una mujer).
 
 En la actualidad y tal vez por desconocimiento del pasado, se le atribuye a Juana León la fundación de Boca de Apiza, cosa que no es verdad, sin embargo no se le niega el reconocimiento de haberse quedado sola con sus hijos en este lugar después de que otras familias anteriores y  contemporáneas a ella lo abandonaron.
   Doña Juana León nació en El Ticuiz el 2 de marzo de 1902 y murió en 1974 a los 72 años de edad, sus padres fueron Gregorio León y Eusebia Jiménez, tuvo 5 hijos que son Salvador, Leopoldo, Elba, Candelaria y Julia y de ellos descienden al menos el 30% de los vecinos de este pueblo.
   Entre 1930 y 1936, Boca de Apiza fue visitado en varias ocasiones por Don Enrique C. Creel el nuevo dueño de la hacienda de Coahuayana, San Vicente y Anexas que la compro a Don Eduardo Iturbide después de que este ultimo, al poco tiempo de firmar el Tratado de Teoloyucan, se exilió en los Estados Unidos de Norteamérica ante las amenazas de muerte vertidas en su contra por los generales Francisco Villa y Emiliano Zapata.
   Siempre que Don Enrique llegaba, tan luego recorría los campos de cultivo de su propiedad, visitaba esta playa y comía en la humilde casa de Juana León, a la  que en  una ocasión, invito y llevó consigo y su esposa a conocer las enormes propiedades tanto propias como de su suegro el general Luis Terrazas en el Estado de Chihuahua.
   Para 1956 en el rancho cercano conocido con el nombre de la Peña del Mar se establecieron un buen numero de trabajadores contratados para el cultivo y cosecha del algodón y uno de ellos llamado Santiago Barajas fue por su familia y la trajo a Boca de Apiza en donde establecieron su vivienda, después llegaron  Antonio González y su esposa Consuelo Rico, José Salazar, Dimas Corona, José Silva y Santos Razo cada uno de estos últimos acompañados de su respectiva pareja.
   El siguiente grupo de inmigrantes lo formaron  las familias Terrones y Valencia  y entre ellos  y los anteriores junto con sus hijos y nietos dan vida a una comunidad que crece mas año con año y de tener 96 habitantes en 1970 para el 2010 contaba con 497 almas repartidas en 180 viviendas,
   Boca de Apiza es considerado como el polo pesquero mas importante de la costa norte michoacana, la primera cooperativa que se fundó fue la Costa de Michoacán  en 1973 y que ahora se encuentra en la playa de la Manzanilla del municipio  de Aquila,
   Pocos años más adelante se fundaron la Platanitos, el Grupo Social, Laguna Verde y la de El Ranchito - San Telmo, todas ellas fusionadas en la actualidad en una federación.
   En el área de servicios turísticos cuenta con 9 enremadas 5 de ellas frente al mar y 3 por la orilla del rio, en donde los cocineros hacen gala de su destreza culinaria, preparando ricos  platillos con pescados y mariscos que son una delicia para el paladar mas exigente.
   En el sector educativo cuenta con los siguientes planteles:
   La escuela preescolar Dolores Correa, la escuela primaria 5 de Febrero, la Tele secundaria ESTV16 815 y el Tele bachillerato Num. 43.
   Aparte de sus bellas puestas de sol y deliciosa comida, después de un agradable baño en el mar o el río, Boca de Apiza también nos brinda la oportunidad de divertirnos jugando fútbol y voleibol de playa o ya de perdida pescando y tomando fotografías de las preciosas aves marinas.

domingo, 9 de abril de 2017

El Saucito


El Saucito Michoacán
 El Saucito, es un rancho que pertenece al municipio de Coahuayana, Michoacán. Se ubica geográficamente entre los 18° 44´ 35´´ de latitud Norte y los  -103° 32´10´´ de longitud Oeste del meridiano de Greenwich, se encuentra a una altura de 323 metros sobre el nivel del mar y cuenta con 41 habitantes distribuidos en 12 viviendas.
   Antes de que existiera este rancho, sus terrenos fueron ocupados por otras personas en distintas ocasiones, el primero del que se tienen datos fue el español Diego de Mendoza que en el año de 1572, cuando se casó con Doña Isabel Ruiz de Monjaraz, tenía en este lugar una estancia ganadera con 50 vacas, 50 yeguas y un burro garañón, así como también una huerta de cacao llamada Santa Clara con 1500 árboles en producción. Después de su fallecimiento acaecido en 1576 se desconoce quienes fueron sus herederos.
   Para 1871 los terrenos pertenecieron a José María Solorio  y después en 1874 a la Compañía Agrícola de Achotan, representada por el ingeniero Arturo Le Harivel que fundó la Hacienda Bellavista dedicada al cultivo del cafeto, que subsistió hasta 1895 y que por alguna extraña razón, todavía aparece en el mapa del Estado de Colima de 1915, que fue elaborado por los ingenieros de la Comandancia de Guadalajara y en el que se incluye el valle de Coahuayana, sus pueblos y sus caminos.
   La fundación de El Saucito se realizó en el año de 1919, cuando aquí se establecieron dos matrimonios con fuertes lazos familiares entre sí, el primero de ellos lo formaban Francisco Mendoza y Juana Calvillo y el segundo Miguel Calvillo y Refugio Mendoza.
  En 1922 llegaron otros tres matrimonios que fueron los siguientes, Daniel Gómez y Laura Campos, J.Cruz Arreguin y Paula Sanchez y el de Tomas Mendoza y María López
   En 1923 Nicanor González y su esposa Petronila Vásquez se sumaron a esta pequeña comunidad rural,
   Cuando se realizó el censo de 1930, El Saucito ya contaba con 76 habitantes, distribuidos en 12 viviendas los titulares de cada una de ellas eran, Alberto Mendoza y Antonina Bueno, Laura Campos la viuda de Daniel Gómez, Juan Mendoza y Pascuala Oseguera, Dario Farias y Fausta Mendoza, Maximiliano Guerrero y J. Trinidad Mendoza, Librada Verduzco Vda. de Mendoza, Geronimo y Juana Cortez, Daniel Mendoza y Luisa Sanchez, Salvador Mendoza y Selsesta Martínez, Salomé González y Ángeles Cisneros y por ultimo Jacinto Mendoza y Juana Murillo.
   Algunos años después una hija de Alberto Mendoza y Antonina Bueno llamada Baudelia contrajo matrimonio con un hombre originario de Aquila llamado Baudelio Lopez y formaron una dinastía familiar que a destacado en el ámbito profesional, político y económico de esta región.
   A pesar de que solo cuenta con la escuela de educación primaria "20 de Noviembre" El Saucito es la tierra natal dos ex-presidentes municipales de Coahuayana, que fueron Dámaso Mendoza López y Elías López Mendoza, del ex-diputado local del Distrito de Coalcoman, Gustavo Lopez Mendoza y del Notario Publico de Apatzingán Gregorio López Mendoza y una pléyade de profesionistas con los mismos apellidos que viven dentro y fuera de nuestro municipio.
   En la actualidad ante la amenaza de las compañías mineras que pretenden destruir las selvas cercanas, ocasionando la muerte de la fauna nativa y la deforestación de nuestra mayor zona de captación de agua de lluvia y ante el peligro de contaminación de los mantos acuíferos que abastecen de este vital liquido al 60% de los pueblos del municipio, los habitantes de El Saucito, encabezados por el Sr. Hugo Barriga y el ingeniero Juan Carlos Marmolejo se han organizado como guardianes de la selva y tienen un proyecto de explotación  racional de los recursos naturales de nuestra región, entre ellos la recolección y venta del café de Moho, la puesta en marcha del balneario conocido como Las albercas del Saucito y un proyecto de explotación de ganado bovino complementamente amigable y respetuoso con el entorno ecológico.
 
    La fotografía fue tomada por Azareth Orozco.

viernes, 7 de abril de 2017

La Hacienda Bellavista de Achotan


El Saucito Michoacán


   Antes de que existiera el rancho El Saucito, los terrenos que ahora son parte de su propiedad, pertenecieron a la Hacienda de Achotan, su dueño en un principio lo fue José María Solorio, un hombre que llegó a la municipalidad de Coahuayana en 1871, era originario de Zinaparo, Michoacán y por esa fecha apenas contaba con 24 años de edad. Un año después contrajo matrimonio en la ciudad de Colima con  Josefa Álvarez y fijaron su lugar de residencia en la Hacienda de La Estancia aledaña a la ciudad antes citada.
    En el año de 1873, ante el creciente interés de algunos inversionistas - representados por el ingeniero francés  Arturo Le Harivel -  en el cultivo del cafeto, vendió una fracción de sus terrenos y en ellos se estableció la Hacienda Bellavista con una superficie de 4 leguas cuadradas  y con una altura de  700 pies ingleses sobre el nivel del mar (213 metros) .
   Fue ahí, en el pequeño valle del actual rancho El Saucito, en donde la Compañía Agrícola de Achotan, estableció el mejor cafetal que conocieron muchos agricultores del vecino Estado de Colima.
   En 1877, año en que se iniciaría la primera cosecha, Harivel tasaba el valor de la Hacienda en $ 30, 000.00, con una diferencia de $ 10, 000.00 sobre el monto de la inversión.
   Dos años después, una incontrolable plaga de pulgón, que atacó inmisericorde la inflorescencia de las plantas, obligo al ingeniero a contraer un préstamo de $12, 182.00 con  un rédito del 12% con los señores Riensch y Compañía.
   Por incumplimiento en el pago de este compromiso fue demandado en 1883, al disolverse Reinsch y Compañía, la deuda paso a manos de García y Schmit, estos vendieron la Hacienda Bellavista en $ 5, 000.00 a un joven de 26 años llamado Ponciano Cervantes Avalos.
   Acompañado de su esposa Margarita Vázquez Gómez que contaba con 22 años  y su pequeña hija Inés Margarita, llegó a la municipalidad de Coahuayana para radicar permanentemente en su propiedad.
 Después de 12 años de arduo trabajo, en el cultivo y cosecha de algodón y ya con una considerable fortuna acumulada, Ponciano Cervantes vendió la Hacienda Bellavista  y retorno a la ciudad de Colima como un verdadero triunfador, ahí compro la Fabrica de Hilados y Tejidos San Cayetano, lo que le permitió poco antes de su muerte, ocurrida en 1904, ser considerado como uno de los hombres más acaudalados del Estado.
   La Hacienda Bellavista desapareció para siempre en 1895, sin embargo, jamás será borrada de la memoria histórica del municipio de Coahuayana, pues fue en ese lugar donde nacieron su dos personajes políticos mas importantes, ellos fueron; Don Laureano Cervantes Vazquez, que fue Gobernador Constitucional del Estado de Colima de 1927 a 1930 y su hermano Pedro Cervantes Vázquez  que se desempeñó como Diputado Federal por el Estado de Colima de 1931 a 1936. 

domingo, 2 de abril de 2017

Palos Marías

Palos Marías Michoacán

   Palos Marías es un pueblo que forma parte del municipio de Coahuayana, en el Distrito de Coalcomán, del Estado de Michoacán de Ocampo, México.
   Esta situado geográficamente entre los 18° 48´45´´ de latitud Norte y los -103° 32´ 00´´ de longitud Oeste del meridiano de Greenwich y se encuentra a una altura media de 242 metros sobre el nivel del mar.
   Fue fundado a principios de 1896 por Aurelio Zambrano y su esposa María Trinidad Montejano, dos jóvenes que anteriormente habían residido en la Hacienda de Chacalapa.  
   Ellos contrajeron matrimonio el 31 de marzo de 1895 ante el juez del Registro Civil y Presidente Municipal de Coahuayana, Hesiquio Gutiérrez.
   Muy probablemente, cuando ella estaba embarazada, abandonaron la finca de la hacienda y siguiendo el cauce del arroyo hacia el noreste, después de recorrer un poco más de 2 kilómetros, llegaron a los placeres de oro y a un costado del arroyo, en una ladera de la montaña  construyeron  su vivienda. 
  El día 13 de octubre de 1896, María Trinidad dio a luz, su hijo al que pusieron por nombre Eduardo, fue la primera persona que nació en Palos Marías.
   El segundo matrimonio que se estableció en este pueblo fue el de Guillermo Zambrano -hermano de Aurelio- y su esposa Laura Sanchez, que tuvieron a su hija Braulia el 17 de marzo del año 1900.
   La tercera familia que se avecindo en este lugar estaba formada por Librado Godínez y su esposa Bromosa Ramírez, aquí nació su hijo Librado, el 22 de septiembre de 1909 y en la misma casa también vivió Calixto Ramírez, un hermano de ella. 
   Cuando se inició la Revolución Mexicana, los constantes enfrentamientos de los habitantes de Chacalapa contra las fuerzas del gobierno federal, impidieron el crecimiento de Palos  Marías y estuvo a punto de desaparecer, tanto así, que en 1921 solo quedaban 3 habitantes.
   Nueve años después, en 1930, todo era distinto, a pesar de la guerra cristera, Palos Marias  creció tanto, que con sus 113 habitantes era la quinta población mas importante de la -entonces- Tenencia de Coahuayana adscrita al municipio de Chinicuila.
   En la actualidad este pueblo cuenta con 328 habitantes repartidos en 132 viviendas,
   En el sector educativo cuenta con tres planteles que son los siguientes:
   La escuela preescolar " María Mercedes Cárdenas Barajas", la escuela primaria "Vasco de Quiroga" y la escuela tele secundaria ESTV16 458.
   El día 15 de mayo, se realizan anualmente sus tradicionales fiestas en honor de San Isidro, el santo patrón del pueblo, en donde todos disfrutan de la cabalgata, el  jaripeo y el  baile con el que se cierra el festejo.
   Este pueblo es la tierra natal de la figura femenina mas destacada del municipio de Coahuayana. la Doctora Gloria Vergara Mendoza, Directora de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Colima, Integrante de la Academia Mexicana de Lengua que cuenta con varios premios y reconocimientos a nivel internacional y también es el lugar de origen de su padre Don José María Vergara Zambrano que fue juez del Registro Civil y posteriormente presidente municipal de Coahuayana.
 


viernes, 31 de marzo de 2017

Maruata

   
Maruata Michoacán
Maruata es un pueblo que forma parte del municipio de Aquila, Michoacán; y pertenece a la comunidad indígena de Pomaro.
   Esta situado geográficamente entre los 18° 16´19´´ de latitud Norte y los -103° 21´20´´ de longitud Oeste del meridiano de Greenwich.
   Se encuentra a una altura media de 20 metros sobre el nivel del mar y cuanto con 697 habitantes.
    Muy cerca del caserío se encuentra una preciosa bahía, en donde se conjuga la belleza de las formaciones rocosas que se adentran en el océano, con el brillo dorado de la arena y el azul turquesa del agua marina, Estando en la playa, con el mar a nuestras espaldas, el espectáculo es igual de alucinante, podemos observar las enramadas y cabañas que se entremezclan con un hermoso palmar y un poco más atrás, la esplendorosa silueta del cerro de La Guitarra.
   La bahía de Maruata fue avistada por primera vez por un extranjero el día 20 de junio de 1527, cuando el capitán español Pedro de Fuentes en la travesía de prueba del bergantín Espíritu Santo, la descubrió y la bautizó con el nombre de Puerto de la Magdalena.
   El pueblo indígena de Maruata que tenía 20 habitantes  fue entregado en encomienda al conquistador Rodrigo Manrique en el año de 1532 y posteriormente cuando paso a manos de la corona, los tributos entregados por sus habitantes al rey fueron administrados por el corregidor Alvaro de Paredes Escudero en 1587. 
   Durante el período de gobierno de Sebastián Lerdo de Tejada como presidente de México (1872-1876), la Prefectura del Distrito de Coalcoman, la Legislatura y la Diputación Federal del Estado de Michoacán, solicitaron la apertura de un puerto de altura en las costas de la entidad y Maruata fue el lugar elegido para establecerlo. En el año de 1874 el ingeniero mexicano hijo de padres franceses, Alcides Drummond fue el encargado de realizar los estudios y los  planos  y a la vez se le otorgó la  Capitanía del Puerto de Maruata.
   Por esas fechas el pueblo indígena originario había desaparecido y el lugar era utilizado por contrabandistas, que talaban los arboles de añil y los vendían a los extranjeros cargando el producto  en los buques de vapor procedentes de los Estados Unidos de Norteamérica.
   El primer encargado de la Aduana Marítima fue Agustín Lozano que de manera arbitraria decidió establecer las oficinas en el puerto de Bucerías situado a 36 kilómetros de distancia. Después de 2 años de servicio el puerto de Maruata fue cerrado y así permanece hasta nuestros días.
   El pueblo actual fue fundado en 1958, la construcción de la carretera costera Boca de Apiza -Lázaro Cardenas en 1982, lo comunico con el mundo exterior y trajo consigo los servicios básicos que necesita cualquier comunidad, el servicio de energía eléctrica en 1995 y el teléfono en el 2001. 
   Fue aprobado como Santuario de la tortuga marina en 1986 y cuenta con un museo que promueve el cuidado y conservación de esta especie.
   En el año 2010 se estableció una base de la Secretaría de Marina que aún permanece ahí.
   En el sector salud cuenta con un Hospital Integral Comunitario y en lo educativo con los siguientes planteles:
   La escuela preescolar Justo Sierra, la escuela primaria Moctezuma y la escuela Telesecundaria ESTV16 452.
   Maruata tiene lo necesario para pasar unas buenas vacaciones y sin lugar a dudas es un pedazo del paraíso que por accidente se quedó perdido en este mundo.